
Al llamar, me recibió un señor semidesnudo, con el albornoz abierto. Me enseñó un billete de 50 euros. Entonces me di la vuelta para salir corriendo de allí
Al llamar, me recibió un señor semidesnudo, con el albornoz abierto. Me enseñó un billete de 50 euros. Entonces me di la vuelta para salir corriendo de allí